PERSONAS ÍNTEGRAS.

Mientras la mayoría de la corporación municipal de San Javier acapara varios sueldos en un afán de codicia pasando por encima y despreciando al 30% de la población que no tiene ningún empleo, otros políticos del país sí que tienen una integridad desconocida en nuestro pueblo:

Julio Anguita, político jubilado que ha renunciado a su pensión vitalicia por su labor política y solo cobra su pensión como docente retirado, porque le parece suficiente para vivir:

Juan Manuel Sánchez Gordillo, alcalde de Marinaleda (Sevilla), que no cobra nada por su labor como alcalde, tiene un sueldo de 3.000 euros como parlamentario del cual renuncia a 1.800 euros para quedarse con solo 1.200 euros al mes (el mismo sueldo que el resto de la población de Marinaleda):

!! A ver cuando les imitan los políticos de nuestro ayuntamiento !!